Carla Arocha y Schraenen vienen trabajando juntos desde 2006. En sus obras, ocultan deliberadamente el estilo artístico personal y el gesto individual mediante el empleo de métodos de producción industrial y materiales como acero, vidrio, espejos o esmalte. El punto de partida para sus objetos esculturales abstractos es a menudo fotografías de objetos cotidianos mundanos. Sus obras involucran al espectador en un sutil juego de percepción: la materialidad se yuxtapone con la inmaterialidad; la presencia física del objeto con su idea mental.
Dueños de una importante trayectoria internacional Arocha y Schraenen han presentado varias exhibiciones individuales, entre ellas: “Tickle” (Milwaukee, 2018); “A Studio Visit” (Antwerpen, 2017); “Maraunding in Molenbeek” (Bruselas, 2017); “Restlessness” (Berlín, 2017).